1.- La narración como
variedad de discurso
La narración, definida como
variedad de discurso, es el relato de uno o varios hechos que se han
producido en un determinado contexto y que se conciben según un orden
cronológico.
Es una forma de transmitir
información y puede formar parte de muy diferentes tipos de texto así como
aparecer en distintas situaciones comunicativas: en una conversación, en los
medios de comunicación, en un debate…
La narración, definida como
género literario:
-
Épica o narrativa es la categoría genérica en la
que se narran hechos ficticios y es la base de géneros como la novela, el
relato corto, el cuento, la epopeya, la fábula, etc.
-
Narraciones o relatos son las obras concretas
pertenecientes a estos géneros.
2.- Aspectos
pragmáticos
Un discurso narrativo es una
representación de hechos. Lo que el emisor pretende es “recrear” en la mente
del receptor una serie de acciones propias o ajenas que este no conoce.
Predomina la función referencial, puesto que en principio lo que interesan son
los referentes del discurso (hechos y sucesos). Pero la intención del emisor no
siempre es informativa. Se narra para recrear lo sucedido, pero se hace a
menudo con propósitos definidos: convencer, entretener, explicar, aleccionar,
etc.
Los elementos de la narración hacen presente en el texto los elementos
que intervienen en la comunicación (emisor, receptor, referentes, etc.). Además
hay que tener en cuenta las técnicas narrativas que afectan al funcionamiento
de cada uno de los elementos de la narración.
.- El emisor se proyecta en el
texto en la figura del narrador, que
es la “voz” que cuenta los hechos. El narrador (a diferencia del emisor) no
solo comunica algo, además contempla los sucesos, selecciona los que le interesa,
los ordena, presenta y describe a los personajes y sitúa la acción en un tiempo
y en un espacio.
.- El receptor se refleja en la
figura del narratario o destinatario
de la narración.
.- Los hechos, personas, lugares
y tiempo en la comunicación, aparecen realizados en los elementos narrativos de
acción, personajes, espacio y tiempo narrativo.
.- Los demás elementos de la
comunicación (canal y código) adquieren relevancia en los textos narrativos
según las técnicas narrativas (oral,
escrita, etc.) y los géneros narrativos
utilizados (novela, policiaca, romance, cómic, película, etc.)
Factores de la comunicación
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Elementos estructurales de la narración
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Emisor →
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←
Narrador
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Destinatario →
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←
Narratario
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Situación
(referentes)
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Hechos →
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Acción
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Personas →
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←
Personajes
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Lugares →
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Espacio narrativo
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Tiempo cronológico →
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←
Tiempo narrativo
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Canal →
Código →
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←
Género narrativo
(técnicas especiales en el
tratamiento
de los elementos estructurales)
|
3.- Aspectos
estructurales: los elementos de la narración y las técnicas narrativas
La estructura de un texto
narrativo viene determinada por las relaciones que se establecen entre los
elementos de la narración. Dependiendo de las técnicas que el autor utiliza
para desarrollar esos elementos, cada uno forma en el texto una estructura
determinada: estructura de la acción, estructura del espacio, estructura del
tiempo, estructura de los personajes.
3.1.- La acción
La acción es la recreación narrativa que hace el narrador de la
secuencia de hechos sucedidos o imaginados. El narrador construye la acción
como una secuencia de episodios narrados en un orden que puede o no coincidir
con el de la historia.
La estructura de la acción depende del autor, tanto de su
intención como del género concreto del relato. Partiendo del esquema clásico de
planteamiento, nudo y desenlace, el autor puede introducir alteraciones que
transforman la estructura:
-
Prescindir de la presentación y comenzar la
narración por el conflicto (comienzo in media res, es decir, en mitad del
asunto)
-
Iniciar el relato por el final de la historia (in
extrema res)
-
Prescindir del desenlace, con lo que consigue un
relato de final abierto.
(ver cuadros y
ejemplos en el libro, pág.237)
Además, el narrador puede
interrumpir en ocasiones el hilo de la acción para introducir digresiones (reflexiones, juicios o
valoraciones de la acción), para alterar los acontecimientos, para intercalar
episodios, etc.
También hay formas de organizar
la acción que dan lugar a narraciones
abiertas (narraciones sin argumento cerrado en las que se pueden incluir
episodios nuevos). Es la llamada técnica
del contrapunto.
3.2.- El tiempo narrativo
Conviene distinguir varios
conceptos de tiempo diferentes en un relato:
.- Tiempo externo. Se refiere a la época histórica en la que tienen
lugar los hechos relatados
.- Tiempo interno. Alude tanto al orden como a la duración de los
acontecimientos narrados
-
Tiempo de
la historia. Definido por la situación cronológica de los acontecimientos y
por el tiempo total que estos abarcan
-
Tiempo de
la narración. Es el orden en que relata el narrador esos acontecimientos y
lo que tarda en contarlos
La relación entre el tiempo de la
historia y el tiempo de la narración determina el ritmo o tempo del relato, es decir, la rapidez o lentitud con que se
narra la acción.
Hay ciertas técnicas con las que
al autor puede alterar el orden
cronológico y la duración de los sucesos narrados:
-
Evocaciones
retrospectivas (o analepsis).
Son saltos temporales hacia el pasado
-
Anticipaciones
prospectivas (o prolepsis). Son
saltos temporales hacia el futuro
-
Narración
de acciones simultáneas que estén sucediendo al mismo tiempo
-
La
elipsis, cuya finalidad es seleccionar los hechos prescindiendo de los de
menos interés para la acción. Función similar tiene el resumen de acontecimientos
-
Las digresiones
y descripciones, que pueden retardar
el ritmo de la narración
3.3.- El espacio
Se entiende por espacio narrativo la reelaboración que
el autor hace del lugar donde transcurre la historia. En relación con el
espacio narrativo hay que considerar las referencias al lugar donde se llevan a
cabo las acciones, así como el desplazamiento que implique el cambio de una
acción a otra.
Las descripciones de lugar suelen
ser fundamentales para crear en la narración un determinado ambiente. El ambiente es el conjunto de
circunstancias de todo tipo (espaciales, sociales, psicológicas, etc.) que
envuelven a los personajes y que los condicionan.
El espacio puede estar concebido
de una manera objetiva, en la que es un reflejo más o menos fiel del mundo
real, o de una manera subjetiva (espacio
reflejo o subjetivo) cuando el
espacio viene determinado por la percepción que de él realiza el personaje
desde su subjetividad.
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